Elisa y Neil acusan a Candy de ladrona, colocando entre sus pertenencias algunas joyas de su madre, cuando la Tía Abuela llega a la casa de los Leegan para la fiesta, la señora Leegan le dice que no encuentra sus joyas, en ese momento Neil entra diciendo que había encontrado algunas joyas en el establo. Neil, Elisa, la señora Leegan y la tía abuela van al establo y los hermanos Leegan comienzan a esculcar las cosas de Candy en busca de las joyas, cuando Candy llega dice que ella no había robado nada, pero no le creen. La señora Leegan decide que Candy debe ir a México en lugar de Doroti. Los jóvenes Andry deciden ir a casa de los Leegan por la noche para obligar a Neil a decir la verdad, sobre que él y Eliza culparon a Candy de algo que no hizo, para que así ella ya no se fuera a México.